Relato de una Mamá...

El Maravilloso Mundo de la Maternidad

…Conocí el miedo al miedo mismo, me encontré temblando, pálida, llorando sola y también en compañía. Llegue a vivir momentos a los que llamé “terribles” y los que supuse que no acabarían jamás. Creí que iba a hundirme en la oscuridad infinita, en la depresión total. Creí que nada podía salvarme de “mis ataques de pánico”, que siempre sería igual. Pero empecé a buscar la salida dentro de mis propias puertas. Y de apoco me fui haciendo cada vez mas fuerte, empecé a confiar mas en mi. Pero siempre me sentía al borde de….con temor a que otra vez volviera a caer en el pozo. Conocí a un medico acupuntor que me ayudó muchísimo, conocí a Emilce, mi psicóloga a quien le confié media vida y mas, la que me ayudó a dar un gran salto positivo. Y un gran día, cuando ya los buenos momentos superaban aquellos pésimos, la vida me dio una gran sorpresa, una de las mas bellas: “las dos rayitas en un test de embarazo”… Guau!!! Fue muy emotivo y muy fuerte, y no voy a negar que me dio un poco de ansiedad y miedito, pero tenía muy en claro lo que quería: “un embarazo llevado con paz y tranquilidad, para brindarle armonía y mucho amor a mi bebé”. Así fue como caminando y viendo ropita para embarazadas, tomé un folleto que decía “espacio de preparación corporal para embarazadas” y me dije: “esto es justo lo que necesito” y realmente no me equivoque. Conocí a Gaby, un ángel, un ser muy especial y espiritual de quien aprendí muchas cosas. En este espacio aprendí a que las herramientas para vivir en armonía, estaban justo dentro de mí y que la base de todas las cosas lindas y buenas que uno desea, es el “AMOR” y se manifiestan a través del “AMOR”.

Este espacio que se nos brindó, a mi pequeña Lara, a Esteban y a mí, nos ayudo a percibirnos, a conocernos, a comunicarnos y a enamorarnos cada día mas los unos de los otros, a fortalecer el vinculo bien tempranito. También aprendí a escucharme, a conectarme con mi propio cuerpo. Pero además de todo eso, que ya es mucho, conocí a otras mamás, algunas primerizas como yo y otras con la maravillosa experiencia. Primero conocí a Vicky, luego llegaron Caro y Sole, después Magui, Rome y Maru y mas. Que lindas personas! Afortunadamente siempre nos estamos viendo, llamando, compartimos lindos momentos. Benja, Julia, Gaelito, Mati y Lara se conocen dentro y fuera del útero. Es un placer cada encuentro. Que hermoso fue descubrir este nuevo mundo (el mundo de la maternidad) y cuanto lo estoy disfrutando. Mi vida hizo un giro de 180º hacia el lado más hermoso.Quiero agradecer a Gaby, y a todas las mamás que compartieron su embarazo conmigo en los distintos espacios donde estuvimos, porque su compañía fue y será siempre valiosa para mí. Gracias por escucharme y por abrir sus corazones. También gracias por confiar. Las quiero!!! Gabriela.